El valor que se fije para la inclinación y el nivel depende de muchos factores, por lo que no es posible dar una respuesta general al respecto. Además del aislamiento térmico del edificio, también influye el tipo de radiadores instalados.
No obstante, pueden utilizarse como guía los siguientes valores estándares para la inclinación:
- 0,3 a 0,5 en una casa bien aislada con calefacción por suelo radiante
- 1,0 a 1,2 en una casa bien aislada con radiadores
- 1,4 a 1,6 en un edificio antiguo con radiadores.
Se pueden realizar los siguientes ajustes para el nivel de la curva de calefacción en un sistema existente:
- Si la temperatura ambiente es, en general, demasiado baja: aumente el nivel
- Si la temperatura ambiente es demasiado baja, especialmente en los días fríos: aumente la inclinación
- Si la temperatura ambiente es demasiado baja durante la primavera/otoño, pero suficiente en los días fríos: aumente el nivel y reduzca la inclinación
- Si la temperatura ambiente es demasiado alta en primavera/otoño, pero suficiente en los días fríos: reduzca el nivel y aumente la inclinación.